jueves, 20 de noviembre de 2008

A veces, hay que saber decir adiós.

Porque todo el tiempo que pasé junto a ti, dejó tejido su hilo dentro de mi. Y aprendí a quitarle al tiempo los segundos, tú me hiciste ver el cielo más profundo. Despegaste del cemento mis zapatos, para escapar los dos volando un rato. Y descubrí lo que significa una rosa, me enseñaste a decir mentiras piadosas para poder verte a horas no adecuadas, y a reemplazar palabras por miradas. Y fue por ti que escribí más de cien canciones y hasta perdoné tus equivocaciones . Y conocí más de mil formas de besar, y fue por ti que aprendí lo que es amar. LO QUE ES AMAR.

Gracias a ti, mi vida dio un giro. Mi razón de vivir tiene ahora otro sentido. Mi camino eligió otro rumbo y llevo siempre presente todo lo que a tu lado aprendí. [You changed my life and all my goals.]

Gracias por haberme querido y gracias por haberme dejado quererte. Por haberme permitido ver el mundo desde tus ojos y por haberte molestado en darme siquiera una parte de lo maravilloso que eres. Por haberme dedicado tanto tiempo y todo esto, SiEMPRE con una cálida sonrisa. Por haberte mantenido en mi vida, aunque sea en otro plano, desde otro punto de vista.

Porque has sido lo mejor de mi, y siempre te recordaré con una sonrisa en la boca. Nada me quitará todos los momentos vividos y los recuerdos compartidos.Sólo gracias. Por ser quien eres, y por haber querido que tu vida se entrelazara con la mía.Ahora todas mis dudas se aclaran. El adiós no ha de ser amargo. Puede decirse con una sonrisa en los labios. Un par de lágrimas pueden caer, pero ya no son lágrimas de dolor. Son lágrimas de felicidad al recordar todos los buenos momentos de un tiempo mejor.Por todo, gracias. Por ser quien eres. Por haberme dado todo lo que ahora soy.

No hay comentarios: